Uros, una isla artificial

En esta ocasión quiero contarles sobre uno de los lugares más sorprendentes que he podido conocer se trata de la isla artificial Uros ubicad en el corazón del Lago Titicaca, como les había comentado cuando les conté sobre mi experiencia en Puno, este lago no solo esconde grandes encantos como la isla natural de Taquile, sino que también es ¡el lago navegable más alto del mundo!

Isla los Uros

En las profundidades del Lago Titicaca crece una maravillosa planta con la cual los nativos del lago han creado la isla de los Uros, el proceso de creación dura varios años y se encargar de amarrar la isla desde las raíces de estas plantas para que sea flotante, pero este en un punto concreto. Cada 20 años aproximadamente crean una nueva isla a la cual se trasladan en las totoras (canoas de los nativos) que también son creadas con esta planta. 

Canoa de Totora

Tan solo el hecho de poder crear una isla y totoras con una sola planta ya es realmente impresionante, sin embargo, esta comunidad también construye sus casas con esta planta y se alimenta de la misma, literalmente los uros construyen su vida en base a esta grandiosa planta acuática llamada #Totora.

Presentación de la isla los Uros

Cuando arribas a esta isla los nativos te ofrecen una explicación de su modo de vida y subsistencia la cual se consiste en gran parte en la totora y el turismo, ya que al ser un lugar tan increíble tiene una gran afluencia turística. Están tan bien organizados que en los techos de sus casas tienen paneles solares lo que les permite… 

¡Tener energía en medio de una isla flotante!

Turistas en la isla los Uros

Si quieres como souvenir puedes comprar diferentes artesanías, sellar tu pasaporte y hasta dar un paseo en sus canoas de dos pisos de totora. Aunque es una isla artificial creada en su totalidad por los mismos nativos, es grande, tienen una casa para cada familia y un mini lago donde cultivan truchas. 

Casa de la isla los Uros, hecha de Totora

Realmente es un lugar tan encantador que las palabras quedan cortas, pero las imágenes ayudan a reflejar lo que intento explicarles. Es de esos lugares que te dejan huella y generalmente nos enseña algo. Por ejemplo, con los Uros aprendí que siempre podemos encontrar un modo para lograr las cosas puede que algunos lo compremos casi todo ya listo y otros lo hagan ellos mismos, pero casi siempre se puede.

Arco de entrada a la isla los Uros

Esa es una de las experiencias que nos enseñan y con esta motivación los invito a conocer la isla de los Uros y aprender mucho más de todas sus costumbres.

Taquile, la primera isla natural que conocí

 ¿Recuerdan que cuando les hablé de mi viaje a Puno les mencioné sobre las maravillas del Lago Titicaca y les dije que es el lago navegable más alto del mundo y que tenía varias islas por su gran tamaño?

Isla Taquile en el Lago Titicaca

Entre esas islas del Lago Titicaca que es un patrimonio compartido por Perú y Bolivia, les hablé específicamente de Taquile una isla natural y de los Uros una isla artificial, ambas se encuentran en territorio peruano, y también les aseguré que eran lugares tan maravillosos que cada una merecían ser relatadas por separado.

Pues efectivamente es así, Taquile es una isla gigantesca (según mi punto de vista para estar dentro de un lago y el esfuerzo físico que me costó recorrerla) en esta isla conviven seis comunidades diferentes y sus territorios están delimitados por grandes arcos de piedra que demarcan cuando entras a un territorio nuevo, hagan de cuenta que son los marcos de enormes puertas invisibles.

Isla Taquile en el Lago Titicaca

Esta isla tiene un puerto ubicado a 3.600 metros sobre el nivel del mar donde la embarcación, que son lanchas turísticas de motor, te deja con la idea de recorrer la isla desde este y sigas el camino de demarcado por la naturaleza para que poco a poco atravieses este hermoso lugar y llegues a la plaza central donde tienen un mercado de artesanías y celebran sus fiestas más importantes, eso está a unos 3.950 metros sobre el nivel del mar.

Isla Taquile en el Lago Titicaca

Ustedes entenderán lo fácil que fue realizar este recorrido teniendo en cuenta que estaba acostumbrada a vivir en una ciudad costera, por momentos sentía que no podía continuar y veía pasar a personas mayores (hasta abuelitos) gringos y europeos con sus pintas turísticas, bastones de caminata y felices como si caminaran por la playa sin ningún esfuerzo. Me hacían sentir que era URGENTE que empezará a mejorar mi estado físico y fuera más activa jajaja.

Isla Taquile en el Lago Titicaca

Finalmente, y después de varias horas de hidratación con energizantes y gran esfuerzo físico logré llegar a su plaza central, que hermoso lugar, parecía que llegabas al cielo ¿O sería tanto el cansancio que San Pedro casi llama? Luego empieza el descenso y recorres el otro lado de la isla, para ver el resto de sus comunidades, una de ella era la de nuestros anfitriones, en un hermoso y rustico restaurante nos dieron un almuerzo reparador con una exquisita trucha frita pescada en el mismo lago y nos contaron un poco de sus tradiciones.

Isla Taquile en el Lago Titicaca

Por ejemplo, recuerdo bien, nos explicaron que los colores y la cantidad de vueltas y adornos en sus prendes representaban a qué comunidad pertenecía, si eran solteros, viudos o casados, diferenciaban sus rangos e inclusive su género y edad con estos detalles tan puntales.

Además, nos contaban que las fiestas y celebraciones allá eran verdaderas fiestas patronales, nada que envidiarle a la fiesta de un famoso o adinerado de la capital. Celebraban no sólo por un fin de semana completo, sino que a veces iban hasta seis días de fiesta e inclusive semanas, en las cuales les daban comida y trago a todos sus invitados y bailaban sin parar …

Isla Taquile en el Lago Titicaca

¡Qué pulmones, qué nivel! Y yo que casi ni podía caminar en el lugar… De la que me salve al no haber ido en medio de alguna festividad jajaja. Y ustedes se preguntarán: ¿de dónde sacan comida y trago para tantos días y tanta gente? La respuesta es muy sencilla de sus propias tierras, ellos cultivan sus productos y tienen animales como chivos y cabras, además de las truchas que pescan. 

Isla Taquile en el Lago Titicaca

Así que, si quieres poner a prueba su estado físico y de premio comer muy rico, los invito a conocer Taquile y aprender mucho más de todas sus costumbres.

Puno, la entrada al lago navegable con mayor altura del mundo

 ¿Recuerdan que ya les he contado sobre mis experiencias en Arequipa, Chivay y el Cañón del Colca? Pues resulta que estas fueron parte de un viaje un poquito más largo, el cual se extendió hasta Puno, un departamento vecino al de Arequipa en Perú, donde encuentras el lago navegable con mayor altura del mundo.

Mirador del inca en Puno

En Puno está el famoso Lago Tititcaca, del cual dicen que tiene forma de pantera, y que lo comparten dos países, Perú y Bolivia. Este lago es altamente turístico, tiene un gran número de islas entre naturales como artificiales, las cuales son construidas a base de una planta que crece en las profundidades del mismo lago.

Además, en Puno puedes visitar el mirador del Cóndor desde donde puedes apreciar toda la ciudad con el lago de fondo y a la vez divisar como se unen los caminos de dos lenguas nativas de este país, la quechua y la aimara.

Panorámica desde el Mirador del inca en Puno

Este lugar tiene una altura aproximada de unos 3.400 metros sobre el nivel del mar, y el frio puede ser realmente fuerte al punto que recuerdo tener puestos dos pantalones, tres sacos, un chaleco, un gorro tejido, medias de lana y sentirme como si estuviera en short y camiseta.

Paseo en el Lago Titicaca

Si ya están en Puno tienen una invitación explicita para navegar por el Lago Titicaca y conocer al menos una o dos de sus islas, como lo son la isla de los Uros una comunidad nativa de la zona que construye su vida en base a una planta que crece en las profundidades de este lago, y la Isla Taquile una isla natural bastante grande que se encuentra en medio de este gran lago.

Ciudad de Puno desde el Mirador del Cóndor

Pero esas islas son lugares tan maravillosos que merecen ser descritas por separado, así que esas aventuras se las contaré en una próxima ocasión y por ahora los invito a ir a Puno y programar unos días para conocer a profundidad los encantos que oculta el Lago Titicaca.

Unión de los Caminos Quechua y Aimara

El Valle del Cañón del Colca y todo su esplendor

Aunque todo en la naturaleza tiene sus temporadas, las visitas de los turistas a este lugar no entienden de eso y es que son cientos de personas de todo el mundo quienes visitan a diario el mirador de este gran Valle. 

 

Valle del Cañón del Colca

Madrugamos para llegar casi con el sol y tener el mejor lugar para apreciar el vuelo del majestuoso cóndor de los Andes, magnifica ave que abre sus extensas alas y planifica sobre este valle como si sintiera un despertador interno y a las 7:00 A.M. se posa en lo alto del cielo para deleitarnos a todos con su gracia al volar y la precisión que tiene al planificar cuando va por una presa.

Mirador del Cañón del Colca

En noviembre cuando se aproxima la época de lluvias, no es la mejor para apreciar el vuelo del cóndor pues empiezan a migrar, sin embargo, como siempre digo yo tengo mucha suerte cuando viajo y en esta ocasión no fue la excepción y contra todo pronóstico puede ver unos cuantos cóndores dominar con su vuelo todo el Valle del Cañón del Colca.

Valle del Cañón del Colca

Este espectáculo dura apenas unas cuantas horas, luego tienes toda la mañana para recorrer y disfrutar de este gran valle, puedes parar en otro mirador a comprar artesanías, o por el camino a observar el paisaje y pequeños poblados de la zona.

Poblados del Valle del Cañón del Colca

Además, pueden realizar actividades como la pesca, bicicleta de montaña, excursión, acampar y senderismo, entre otras. Pueden ir con un guía, en un grupo grande o pequeño con amigos por su cuenta. Pero eso sí tengan mucho cuidado de no perderse, es un valle sumamente hermoso pero grande, donde pueden encontrar animales a su paso y podría resultarles muy difícil regresar a casa como le pasó a un estudiante universitario de Perú, quien fue con su novia de excursión al Cañón del Colca y jamás regresó.

Panorámica del Valle del Cañón del Colca

Así que, en este caso, realmente les recomiendo ir con una guía, o en su defecto bastantes provisiones, un gran mapa del lugar, una buena brújula y un rosario de precauciones y otro de esos para rezar por si no encuentran cómo regresar.

Mirador del Cañón del Colca

Pero que esto no los desanime a conocer este hermoso valle, es cuestión de conseguir un guía en Chivay y que con gusto les haga el mejor recorrido turístico, el cuál puede durar unas horas o varios días, ya depende de las actividades que deseen realizar.

Valle del Cañón del Colca

Así que ya saben… ¡si quieren ver al famoso cóndor de los Andes volar, al Valle del Cañón del Colca deben viajar!

Mirador del Cañón del Colca

Chivay, un viaje en el tiempo

Plaza principal de Chivay

¿Alguna vez han ido a algún lugar que les hace sentir que viajan en el tiempo?  Les pregunto esto porque esa fue mi sensación al llegar a Chivay, es un pueblito en la región de Arequipa que es la entrada al Valle del Cañón del Colca.

Luego de pagar el impuesto al turista correspondiente para poder pasar la entrada al pueblo en la terminal de buses donde desembarcas al llegar en bus después de un viaje de 6 horas por carretera desde la ciudad de Arequipa; pasas por un arco que da la sensación de ser el arco del tiempo, pues este pequeño pueblo parece estar unos 30 años atrás.

Las edificaciones son en su mayoría en piedra y con acabados antiguos, gran parte de su población usa trajes típicos y es sumamente común ver pasar por la plaza central del pueblo y sus alrededores a las MAMACHAS* pasear acompañadas de sus llamas.  

Esto en Chivay es tan natural, como en la ciudad ver pasar a una mujer paseando a su perro.

Algo particular y que personalmente me afectó fue la altura y frio que hace en este lugar, llegué a las 10 am así que desayuné algo ligero y salir rumbo a los hermosos termales de la Calera con la idea de aprovechar el tiempo, ya que hasta el día siguiente saldría con destino al Valle del Cañón del Colca.

Termales de la Calera

Esa ida a los termales, aunque fue realmente relajante, me generó una gran descompensación, literalmente casi me desmayo por la altura estábamos a unos 3.000 metros sobre el nivel del mar y yo venía de Lima una ciudad costera. Tuve que tomar bastante agua, regresar directamente a la plaza del pueblo para almorzar y luego ir a descansar al hotel.

Plaza principal de Chivay

Cuando pensé que lo peor había pasado, llegaron las 4 de la tarde, hora en la que el frio y el viento en Chivay se vuelve intratable, puedes abrir la llave y prácticamente te salen pequeños cubos de hielo en lugar de gotas de agua. Lo bueno es que a eso de las 7 pm calman los vientos y el frio disminuye lo que permite ir hacia la plaza central para comer. Es recomendable pedir que una mototaxi te lleve hasta allá, pues no hay alumbrado público y gran parte del camino no está pavimentado.

Fuente de la plaza principal de Chivay

Sin embargo, Chivay es un pequeño pueblito, tranquilo y seguro, todos sus habitantes se conocen, son muy amables con los turistas y se encargan de darle las mejores recomendaciones, así como de brindarles mate y hojitas de coca para chacchar en caso de que te esté afectando la altura.

Calle de ingreso desde la terminal al pueblo de Chivay

Sin lugar a dudas fue una grata experiencia y una gran aventura que sólo me estaba anticipando lo que viviría al día siguiente en mi ruta por el Valle del Cañón del Colca, lugar al que a diario llegan miles de turistas de todo el mundo desde antes de la 7 am a apreciar el vuelo del cóndor, pero esto se los contaré en una próxima oportunidad.

*Mamachas: mujeres originarias de la sierra peruana, suelen vestirse con polleras (faldas típicas de la población de la cultura andina).